Ir al contenido principal

Madre, poema de Karen Valladares




Madre
Del poemario En mi una cicatriz
De la poeta Karen Valladares

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Antonio José Rivas

Yo soy un poeta, un ejército de poetas. Y hoy quiero escribir un poema, un poema silbatos un poema fusiles. Para pegarlos en las puertas, en las celdas de las prisiones en los muros de las escuelas. Hoy quiero construir y destruir, levantar en andamios la esperanza. Despertar al niño, arcángel de las espadas, ser relámpago, trueno, con estatura de héroe para talar, arrasar, las podridas raíces de mi pueblo.

Edilberto Cardona Bulnes

La Catedral De arcilla. Greda y grave, cal, arena. Y piedra, piedra, piedra, agua, yeso. Y de espalda tirante hasta el cerezo, hasta el tinto clavel, subió la pena. Ascendió porque sí, dócil, morena, y al falso del andamio, vino el hueso, a tributar su novilunio espeso ya fuera de los días y la almena. Así llegó el milagro que la dora, sin confesar quién la llevó al encuentro del amado, total, que la enamora. Y el que la alzó, oscuro, de su centro, si se quiere ignorar, o se le ignora, allí quedó, crucificado, dentro. Fuente  https://internatural.blogspot.com/2019/12/dos-poemas-de-edilberto-cardona-bulnes.html

Poemas de María Eugenia Ramos

DE ESTE PAÍS Y DE ESTAS GENTES Como un norte helado y cruel el dolor ha caído brutal sobre este tiempo y estas gentes. Las tierras ávidas, las mesas de trabajo, las mujeres encinta han desaparecido bajo una lluvia sucia de hojas disecadas y animalitos muertos. En todos los pasillos cientos de espejos rotos reproducen el polvo. A juzgar por la imagen que devuelven ningún hombre está sano. Solo aparecen rostros incompletos, ojos llenos de furia, bocas incapacitadas para el beso, frentes donde todos los pensamientos mueren sin pasar de embriones. El odio se distribuye en panes por las mesas.  No hay sitio para la sal y el café de las mañanas tiene un sedimento amargo. Son los pobres de luna, los mendigos del ojo solitario, los impotentes, los maniáticos,  los que hoy deciden sobre la restauración de catedrales, el curso de los ríos y la conveniencia del amor. Estar vivo y ser de este país y de estas gentes no es alegre ni triste, sino necesario. Ser fiel a las raíces, seguir crey...