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Poemas de María Eugenia Ramos

DE ESTE PAÍS Y DE ESTAS GENTES


Como un norte helado y cruel
el dolor ha caído brutal
sobre este tiempo y estas gentes.
Las tierras ávidas, las mesas de trabajo,
las mujeres encinta
han desaparecido
bajo una lluvia sucia de hojas disecadas y
animalitos muertos.

En todos los pasillos
cientos de espejos rotos
reproducen el polvo.
A juzgar por la imagen que devuelven
ningún hombre está sano.
Solo aparecen rostros incompletos,
ojos llenos de furia,
bocas incapacitadas para el beso,
frentes donde todos los pensamientos
mueren sin pasar de embriones.

El odio se distribuye en panes por las mesas. 
No hay sitio para la sal
y el café de las mañanas
tiene un sedimento amargo.

Son los pobres de luna,
los mendigos del ojo solitario,
los impotentes, los maniáticos,
 los que hoy deciden
sobre la restauración de catedrales,
el curso de los ríos
y la conveniencia del amor.

Estar vivo
y ser de este país y de estas gentes
no es alegre ni triste, sino necesario.
Ser fiel a las raíces,
seguir creyendo en la posibilidad de la esperanza,
es el único modo de sobrevivir
a la miseria de este tiempo.



MEMORIA

Nosotros
esta generación
estamos hoy ante las rejas
del recelo
mudos
para no repetir palabras hechas
sordos
para no escuchar los aullidos del lobo.

Nos hemos quedado
como huérfanos
con un vacío tan enorme
que no pueden llenarlo ni las lágrimas.

Apenas estamos entendiendo
que el camino de ida
puede ser en realidad el de regreso.

(De Porque ningún sol es el último, Ediciones Paradiso, Tegucigalpa, 1989.)


PARA DESCARGAR OBRA Porque Ningun Sol es el Ultimo, 

ve  http://es.scribd.com/doc/137653441/Porque-Ningun-Sol-Es-El-Ultimo 

Porque ningún sol es el último Ver, www.academia.edu

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